[Música clásica]
El pinche Pancho da la bienvenida al público de la Noche Blanca a unas cocinas muy especiales en las que lo que se cocina no son ricos asados ni suculentos guisos; nada de paellas, ni mariscos o soufflés exquisitos. Allí se cocina ópera. Y os preguntaréis, ¿por qué van a cocinar ópera? Y bien, aquí va nuestro secreto; las óperas, al igual que los platos de alta cocina tienen que prepararse con mucho esmero y dedicación y al degustarlos crean en el comensal una sensación de extremo placer. En esta cocina se presentan dos chefs de fama mundial, el grandísimo cocinero Ma non troppo y la fantástica chef Ritonella. Ambos son experimentados en esto de cocinar óperas y se juegan la oportunidad de ganar la estrella Miresi, el mayor galardón en cocina operística. Su rivalidad y sus ansias de ganar una estrella más a su palmarés, harán que sus platos tengan ese toque divertido y caótico y que el público asistente pueda elegir quién se lleva la estrella ese día. ¿Qué tal cocinar un plato de Mozart, Rossini, o Händel, o una zarzuela (nuestro plato estrella)? Muchos platos musicales con los que el espectador podrá recorrer la historia de la música. Una música con mucho sabor.